Este colgante de corazón azul turquesa está hecho de auténtico cristal de Swarovski.
El corazón simboliza perfectamente el gran ritmo de la vida. Él es el centro de todo. Es el asiento de los sentimientos, el amor, la compasión y también representa la virtud y el coraje. Está montado sobre una fianza de color plata y cordón negro.
El turquesa, derivado del azul y el verde, combina espiritualidad y renacimiento. También desarrolla un espíritu de tolerancia, esperanza y generosidad. Por lo tanto, promueve la evolución, la transformación y crea una atmósfera propicia para la meditación y la creación.