Aquí está la segunda parte sobre el tema: ¡Comprender la identidad judía!
Por Jonathan Aikhenbaum, Jerusalén
- 930
¿Hubo una reforma religiosa en el reino de Israel?
Cuando se convierte en rey de Israel, Jeroboam enfrenta una situación política delicada. Jerusalén, símbolo de unidad y lugar central de culto, está bajo la soberanía del reino enemigo de Judá. Jeroboam teme por la solidez y la cohesión social de su reino si sigue dependiendo de Jerusalén.
Entonces inicia una profunda reforma religiosa que dejará su huella en la historia del reino de Israel hasta su desaparición. Restaura dos santuarios de los días de los Jueces que habían sido cerrados (habrá una sola casa del Señor en la tierra de Israel, en Jerusalén). Los israelitas que ya no puedan ir al Templo de Jerusalén irán a Bet El y Dan, ambos en el territorio del reino de Israel.
El segundo cambio introducido por Jeroboam es el tamaño. En estos dos santuarios hizo instalar becerros de oro. Como en la época del desierto, el becerro de oro no debe ser la divinidad sino una imagen que permite relacionarse con ella.
El establecimiento de un culto a medio camino entre el monoteísmo puro del reino de Judá y la idolatría de los reinos vecinos separará cada vez más a los dos reinos y hará imposible su unificación. Políticamente motivada, la reforma religiosa fue fatal. El reino de Israel nunca volverá al monoteísmo de la Torá, oscilando entre el culto de Jeroboam y el de las tribus vecinas.
Alrededor de -874 -853
¿Cómo luchó el profeta Elí contra Baal en el Carmelo?
Eli es un poderoso profeta que vivió y trabajó en una época en que el reino de Israel, que ocupaba la tierra del norte de Israel, descendía a la idolatría en todo el país, con el establecimiento de un culto y un clero dedicado a la divinidad de Baal.
Para restaurar el culto a Israel, Eli se propone llevar a cabo una brillante acción. Convoca a los sacerdotes de Baal a un desafío en el Monte Carmelo. Cada bando debe preparar un sacrificio y pedir a su deidad que lo consuma. Eli conoce la prohibición de la torá de sacrificar fuera del templo pero toma la iniciativa de transgredir esta prohibición en vista de la gravedad de la situación.
En el Monte Carmelo, Elí y los sacerdotes de Baal se enfrentan. Frente a la gente que corría para asistir al enfrentamiento, cada uno preparó un altar con un toro. Los sacerdotes de Baal comienzan a invocar su divinidad, esperando la consumación de su sacrificio y la confirmación de la verdad de su fe. Llegan a cortarse la carne, pero nada funciona.
Mientras tanto, Eli hace poner agua en su altar, para mostrar que el Dios de Israel no tiene dificultad frente a los obstáculos materiales, a diferencia de la llamada deidad de Baal. Luego invoca el nombre del Señor, pidiendo la ilustración de la verdad de la fe de Israel. Luego, un fuego desciende del cielo y consume el sacrificio. Estigmatizada por Eli, la multitud luego da muerte a los sacerdotes de Baal. El culto a la idolatría fue erradicado de Israel, por un corto tiempo.
Hacia - 722
¿Cómo fue destruido el reino de Israel?
Desde el siglo VIII antes de la era común, Asiria ha estado involucrada en una política de poder que finalmente le costará al reino de Israel su independencia. Se producen varias incursiones asirias sobre el reino de Israel (e incluso sobre el de Judá).
En - 734, Tiglat-Pilézer, rey de Asiria, lanzó sus tropas hacia el sur. Atraviesan el Reino de Israel y ocupan Gaza, Ashkelon, parte de Egipto. Israel y Fenicia se unen en una coalición contra Asiria en la que quieren involucrar a los estados del sur: Amón, Moab, Edom y Judá. Judá se niega a participar en la coalición, el propio Egipto permanece en guardia. Israel ataca a Judea para obligarla a salir de su neutralidad. Esta campaña, dirigida por el rey Peqah de Israel, causó muchas víctimas. Peqah lleva cautivos a 200.000 judíos, hombres, mujeres y niños. El profeta Oded protesta contra el trato dado por los israelitas a sus hermanos de Judea. Se las arregla para convencer a los soldados de que los liberen y los envíen a casa, alimentados y vestidos. Valiente iniciativa en un ambiente fratricida...
Para librarse de la influencia del reino de Israel, el rey Acaz de Judea apeló a la propia Asiria, que invadió el Reino de Israel y lo sometió por completo. El rey Pekah es reemplazado por Oseas. El Reino de Judá debe pagar un alto precio. La falta de hermandad entre los dos reinos precipitará directamente el fin del reino de Israel.
En 722, Salmanasar V, el gobernante asirio, murió y su hijo Sargón II lo sucedió. Completa la conquista del Reino de Israel tomando su capital, Samaria. El Reino de Israel dejó de existir.
Desde 722
¿Qué son las Diez Tribus Perdidas?
Cuando los asirios conquistaron el reino de Israel, completaron su obra de destrucción mediante grandes intercambios de población. Los israelitas fueron deportados a provincias distantes del reino asirio mientras que los colonos arameos y kuteanos fueron invitados a establecerse en Samaria. Asistimos entonces a un doble proceso de asimilación: en el territorio del reino de Israel y en las provincias asirias donde estaban asentados los israelitas. El reino de Israel practicaba la idolatría de forma más o menos organizada desde hacía siglos. Así que la asimilación se ha acelerado.
Con la desaparición del reino de Israel, el reino de Judá reúne sin embargo a miembros de las tribus de Judá, Benjamín y Leví, así como a otras tribus que llegaron a establecerse en el territorio de Judá. Sin embargo, la desaparición de las tribus del norte se vive como un drama nacional en la historia de Israel. El carácter de cada tribu, definido por Jacob, desaparece con ellos y todo el cuerpo de Israel queda incompleto, mutilado. De ahí la profecía de que al final de los tiempos volverán las diez tribus de los cuatro rincones del planeta y con ellas los personajes desaparecidos de la identidad de Israel.
Desde -700
¿Quiénes son los samaritanos?
Los samaritanos descienden de los arameos y kuteanos asentados por Sargón II en el territorio del Reino conquistado de Israel.
A su llegada a la tierra de Israel, algunos serán atacados por bestias feroces y lo verán como una señal de la necesidad de servir a la divinidad local. Los asirios les traen entonces un sacerdote israelita deportado, que les enseña la tradición espiritual de Bet El y Dan, es decir, la de Jeroboam, con la adoración del becerro. La mezcla entre esta religión y su cultura de origen dará su propia especificidad a estos grupos. Con la destrucción del reino de Judá, se expanden hacia el sur. Los samaritanos aún existen en pequeños números y tienen su centro en Siquem, Samaria.
-736 - - 716
¿Los judíos practicaban la adoración del fuego?
Fue bajo el rey de Judea Acaz, contemporáneo y catalizador de la desaparición del reino de Israel, que este culto hizo su aparición en Jerusalén.
Acaz lleva la idolatría a un nuevo nivel. Los altares dedicados a Baal hacen su aparición en el corazón mismo del templo de Jerusalén, con la aprobación de los sacerdotes.
Al pie del templo, en el valle de Hinnoam (Gehena), Acaz introdujo el culto de Moloc. Los niños son sacrificados al fuego. El propio rey inmola a dos de sus propios hijos durante siniestras ceremonias.
También sujeto a Asiria y amenazado de invasión, Acaz no escuchó las exhortaciones de su contemporáneo, el profeta Isaías, y permaneció tercamente apegado a la idolatría.
Alrededor – 587
וַיִשְרֹף אֶת-בֵית-icyֹהֹוְאֶת terrible.
Reyes II, 25-9
¿Cómo fue destruido el templo de Jerusalén?
Judá se divide entre su vasallaje a Egipto y Caldea (Babilonia). Nabucodonosor llevó a cabo la deportación de 10.000 notables y la familia real, saqueó el templo y los palacios y colocó a Sedecias en el trono en 597.
Sedecias luego encabeza una delegación que asegurará a Nabucodonosor de su sumisión.
El profeta Jeremías envía a los miembros de esta delegación una carta advirtiendo contra el nacionalismo y los “falsos profetas”, también anuncia la inminencia del exilio y su duración limitada: 70 años.
Sin embargo, la tentación del nacionalismo es fuerte en Judá. En -593, mientras Jeremías todavía abogaba por la sumisión al poder caldeo, la coalición anticaldea que Egipto quería establecer estaba en camino al éxito y el espíritu en Jerusalén era de nacionalismo exacerbado. Los “profetas” desafían a la gente y la alientan en esta dirección. Jérémie reprende a uno de ellos, Hanania Ben Azour, cuando afirma que en el espacio de dos años se romperá el yugo de Caldea.
Las esperanzas nacionalistas son demasiado poderosas y en – 589, Sédécias se une a la coalición liderada por el faraón Apries. Incluye Egipto, Fenicia, Judá y Amón.
Para romper su vasallaje con Nabucodonosor, Zedecias se niega a pagarle su tributo anual. El rey de Babilonia responde marchando a Judea. El ejército egipcio tardó en acudir en ayuda de su aliado, y el sitio de Jerusalén comenzó el 10 de Tevet (diciembre-enero). Jeremías describe al pueblo intentando un regreso superficial a la religión de Israel en respuesta al asedio. El desbloqueo del cerco gracias a la intervención egipcia saca a la luz la obsolescencia de este movimiento popular, y la idolatría vuelve con renovada fuerza. Jérémie es arrestado y encarcelado. Los caldeos pronto regresan y vuelven a sitiar Jerusalén. Desde lo más profundo de su prisión, Jérémie continúa incitando al pueblo a rendirse incondicionalmente. Es entonces el objeto de una lucha entre los nacionalistas para los que es un peligroso derrotista y los que creen en sus profecías. El mismo rey Sedequías será influenciado a veces por unos, a veces por otros, matando a Jeremías en un pozo de lodo por agitación, y luego dando la orden de salvarlo cuando se le informe de la gravedad de la muerte a golpes del profeta.
Pero los caldeos no están ociosos y pronto abren una brecha en la muralla, precipitándose en la ciudad: saqueo, masacre, destrucción. Saquean Jerusalén, deponen al rey Zedecias, asesinan a sus hijos, le sacan los ojos y lo llevan cautivo. Otros seguirán y formarán la segunda ola de deportación de Nabucodonosor.
El sitio de Jerusalén termina en 586 con la destrucción del Templo en llamas. El Reino de Judá experimentó, dentro de 136 años, el mismo destino que su vecino del norte.
-592
Echatal, בִשְלֹשִים שָנָر ברְבִיעִי בַחֲמִשָر לַחֹדֶש וַאֲנִי בְתech ֹלָر עַל-נְrero-כְבָר נִפְתְחו erior
1 contra 1
¿Quién es Ezequiel?
Ezequiel es un profeta que ejerce desde - 592 en Caldea, entre los primeros judíos exiliados por Nabucodonosor. Profetiza en Tel Aviv, una de las colonias donde se asentaron los deportados del 597. Estos últimos están convencidos de que una revuelta del Reino de Judá contra Caldea puede triunfar y restaurar su independencia. Elementos muy nacionalistas, empujan a Sédécias a superar a Chaldea. Ezequiel intenta devolverlos a la realidad sobre la desproporción de las fuerzas existentes y especialmente sobre el hecho de que la fuerza de Israel descansa sobre un recurso inexistente en este momento: el crédito que Dios da a los hombres que andan en sus caminos. La situación previa al desastre empuja a los deportados al derrotismo y al fatalismo. Ezequiel protesta contra esto y desarrolla en sus profecías el tema de la responsabilidad individual sobre el que descansa el futuro de la nación.
-538
todavía
מִכָל-עַםוֹ יְהֹוָה אֱלֹהָיו עִםוֹ וְיָעַל:
“Así dice Ciro rey de Persia: El SEÑOR, Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y él es quien me ha encargado que le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judea. Si hay entre vosotros alguno de su pueblo, que su Dios sea con él y que suba…”
¿Cómo regresaron los primeros exiliados?
Como en el sueño de Jacob, los imperios surgen y caen: después de Asiria, que puso fin al reino de Israel, le toca a Babilonia vivir este destino. En – 539, el persa Ciro se convirtió en dueño de Caldea y de todas las provincias adjuntas a ella, incluidos los territorios de los antiguos reinos de Israel y Judá.
Ciro emite un edicto que permite a los judíos regresar a Jerusalén y reconstruir el Templo allí. La política de Ciro está marcada por una gran tolerancia, sin duda unida también a un fuerte sentido del realismo político, lo que le hace comprender que su pie sobre su inmenso imperio estará mejor asegurado si es el adalid de las especificidades nacionales, el defensor de los derechos de las minorías.
Ciro integra los panteones locales de los pueblos que están bajo su tutela, práctica común en la antigüedad. Así, Ciro presenta el edicto para la reconstrucción del Templo como una elección que emana del mismo Dios de Israel.
Ciro concede a los judíos algo más que permiso para volver al país y reconstruir la casa de Dios: les da todo el tesoro del Templo que había sido tomado por Nabucodonosor, y financia con el tesoro real todo lo que costará esta empresa. .
A partir del año 537, un grupo de aproximadamente 49.000 (hombres, mujeres y niños) está listo para regresar a Judea. A su cabeza dos hombres: Joshua el Cohen. nieto de Yeotzadak, el último Sumo Sacerdote del Templo asesinado durante su destrucción. Es él quien asegurará el sacerdocio. Zorobabel, el nieto de Yoyakin, el joven rey deportado en 597, es de la familia de David. Su función es ser Peha, gobernador provincial.
El grupo llega a Judea. Estos son los primeros Olim (montantes) del período posterior al Primer Templo. Aunque toda la tierra de Israel está abierta para ellos, se establecerán principalmente en el antiguo territorio del Reino de Judá.
Fin – 537, levantan un altar en el sitio del Templo y proceden a los sacrificios diarios, luego celebran la fiesta de Sukot.
Luego se coloca la primera piedra para la reconstrucción del Templo. Los siguientes problemas hacen que la obra quede bloqueada durante 16 años y no se reanude hasta el 520.
Desde -580
אִיש יְהודִי הָיָה בְשושַן הַבִירָulaciones
Había un hombre en la ciudad capital de Susa, y su nombre era Mardoqueo, hijo de Jair, hijo de Cis, de la tribu de Benjamín.
¿Qué es un judío?
El término judío aparece en los libros que forman el cierre cronológico de la Biblia, desde Jeremías hasta Zacarías pasando por Ester. El rollo de Ester, en particular, menciona sobre Mardoqueo que "un hombre judío vivía en la capital Susa y su nombre era Mardoqueo, hijo de Yair, hijo de Cis, de la tribu de Benjamín". Este detalle descarta inmediatamente la posibilidad de que un judío sea simplemente un descendiente de la tribu de Judá.
La característica de Mardoqueo es que ya no vive en Judea sino en el exilio. Un judío es un habitante del reino de Judá que vive en el exilio persa, independientemente de la tribu de la que descienda. Es una definición política y no étnica. En otras palabras, el judío es el expatriado del reino de Judá.
La mención del término judío en relación con la historia de Ester es particularmente significativa. El rollo de Ester es el libro que hace la transición entre el período de la Biblia y el del judaísmo. La diferencia entre estos dos mundos se basa esencialmente en la presencia y ausencia de profecía. Con Ester (nombre arameo que también tiene el significado hebreo de: me esconderé), Dios vela su rostro, la profecía desaparece. La "palabra va al destierro" al mismo tiempo que el pueblo. Separado de su tierra y de la palabra eterna, es esencialmente a través del estudio y la conmemoración en el tiempo que el judío perpetuará la civilización hebrea.
Por Jonathan Aikhenbaum, Jerusalén
